Un lugar para conocer.

Ya no hay dudas que aprender jugando es la mejor manera de incorporar información y conocimientos.
Ésta es precisamente la idea que inspira a los que hacemos Tecnisferio, módulos que no casualmente parecen juguetes que al ser dinámicos se convierten en interactivos.

Pretendemos colaborar con los estudiantes y docentes que no encuentran con facilidad vínculos entre los conceptos teóricos de las materias técnicas o científicas y la visualización aplicada de esos conceptos.
De hecho las Exposiciónes y Talleres Temáticos surgieron para dar respuesta a la demanda educativa creada con la puesta en marcha de la Ley Federal de Educación, que incluye el área de tecnología desde el principio del plan de estudios.
A partir de un trabajo minucioso, adquirieron forma los módulos temáticos y los conceptos de apoyo que complementan las instrucciones de los guías de la exposición.
En cada caso, la explicación incluye un objeto, mezcla de obra plástica y representación tecnológica.
Para construir los módulos, se respeto un estilo, se eligieron esencialmente elementos en desuso, por estar rotos, viejos, agotados, pasados de moda, pero que a pesar del olvido tenían una historia conocida o digna de ser buscada.(El 60% del material utilizado en la confección de los módulos es reciclado).
La consigna de semejante elección respondió a la intención de combinar el caudal de conocimientos, con fuertes dosis de emoción, a fin de que los módulos
no sean solo dinámicos, sino que también provoquen un ida y vuelta de las experiencias y sensaciones.
Se trata entonces de una propuesta que invita al público a descubrir los objetos conocidos en los conjuntos, a ver como éstos se adaptan a una función para la
que no fueron creados a inventar nuevos objetos y a encontrar otras combinaciones posibles entre ellos.
Es decir, la propuesta desafía al público, sin importar la edad, a poner en práctica una actitud que se repite todos los días, que es en la que se basa la tecnología y toda la historia del hombre.